En agosto del año 1995 ocurrió una gran
catástrofe invernal que afectó desde la Región del Maule hasta Magallanes,
considerado el peor fenómeno climático en los últimos 40 años.
Frente invernal, que al comienzo a ningún
magallánico sorprendió, pero que pronto fueron bajando las temperaturas,
llegando hasta los -14ºC. El forraje almacenado
para situaciones de malas condiciones meteorológicas comenzó a escasear
rápidamente, dejando a ovejas y vacunos atrapados bajo metros de nieve. Ésta terminó obstaculizando todas las calles
en su totalidad, dejando entre diez y doce mil familias damnificadas. Sin
embargo, los más afectados por este fenómeno fueron los ganaderos, ya que murió
en promedio el 20% del ganado ovino, y en zonas de Isla Grande de Tierra del
Fuego, las pérdidas fueron aproximadamente del 80%. La pesca también se vio
afectada con la pérdida de más de 20.000 truchas y 50.000 salmones.
A finales de aquél mes, el gobierno pudo
limpiar caminos y entregarle ayuda a los damnificados, principalmente a los
ganaderos. En esta acción también participaron gran parte de Las Fuerzas
Armadas, Carabineros y el Instituto de
Desarrollo Agropecuario, que abrió líneas de crédito especiales y subsidios
para campesinos y pequeños productores que se vieron más afectados.
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